Hola queridos lectores. Buen domingo. ¿Cómo están? Este fin de semana he aprovechado para hacer una re-lectura de una historia, que leí hace mucho tiempo. Como creo que ya comente en algún momento, hay historias que según pasa el tiempo, al volver a leerlas, te vuelven a encantar y descubres nuevos significados. Así es el caso del libro que les vengo a comentar hoy.
Título: Como agua para chocolate
Autor: Laura Esquivel
Editorial: Suma de Letras
Páginas: 264
Año de publicación: 1989 Original / 2014 Ed. conmemorativa 25º aniversario
ISBN: 9789974957916
Calificación: 12/12
Como agua para chocolate es la primera novela que público Laura Esquivel en 1989. La autora, nacida en 1950 y de origen mexicano, pronto descubriría que su opera prima se convierte en best seller, ganadora de varios premios y traducida a treinta idiomas. Fue llevada a la pantalla grande compartiendo el mismo éxito que la novela.
No recuerdo bien como llego a mis manos el libro en su momento. Si fue algún préstamo de un amigo o era de la biblioteca. Sé que fue en la etapa de transición entre la adolescencia y la adultez. Pero lo que sí recuerdo, lo cautivo que me tuvo la lectura y la sensación de luego terminarlo. Una mezcla agridulce. Queriéndola por todo lo que trasmite, la pluma con la que escribe Laura, pero el amargor de la historia en sí.
Releer una historia como esta, casi veinte años después –con un bagaje lector mayor al de esa época y un background personal también copioso–, puede ser un arma de doble filo. Hay historias que atrapan y las catalogamos como muy buenas, llevándolas en la memoria de esa manera, pero que pierden su encanto si las volvemos a leer. Otras –como es el presente caso–, no solo la volvemos a disfrutar como la primera vez, sino aún más, volviéndonos a encantar pagina tras pagina y descubriendo nuevos significados.
La historia nos habla de un amor que no fue permitido en su momento. Tita la protagonista se enamoro de Pedro y esté, de ella. Pero la tradición de la época –la novela se ambiente en México durante la revolución– hacia que Tita por ser la hija menor no podía desposarse y debía cuidar de su madre hasta su muerte. Por tal, Pedro se casa con la hermana de su enamorada, Rosaura. Con el tiempo sabría que lo hizo para estar a su lado. Este amor condenado a no realizarse y hacer sufrir, bajo la tiranía de una figura matriarcal, me recuerda mucho al que se da en La casa de Bernarda Alba, de mi querido Lorca. Y luego el final será igual de trágico para los amantes.
¿Pero qué tiene de especial, una historia de un amor que es condenado? Puedo mencionar el estilo narrativo de la autora, enmarcado en el realismo mágico contemporáneo. Trasmitiendo y haciéndonos vivir los sentimientos de los personajes, las costumbres de la época y como se vivió la guerra revolucionaria. Rodeándonos con olores de una cocina, donde al mezclarse los ingredientes adecuados, se pueden aplacar dolores del alma o despertar pasiones ocultas. Seres que cruzan el velo entre la vida y la muerte para tomar venganza o para ayudar a los encarnados. También, encontrar pasajes que no son meros versos para hacer continuar la trama, sino que trasmiten enseñanzas. Quizás no tan útil como la receta de rosca de pascuas, pero que el alma del lector agradecerá –como sucede con novelas de Coelho o Weiss–.
Redescubrir esos mensajes y detalles que se me habían olvidado, hace que vuelva a calificar Como agua para chocolate, una novela de doce sobre doce en la escala Rusito o cinco sobre cinco en estrellas. Recomendándola para quienes no la conocen e invitando a releerla, aquellos que ya la disfrutaron.
Sin querer extenderme más por hoy, me voy despidiendo hasta la próxima entrada. Los leo en los comentarios, con sus aportes, que siempre son bienvenidos.
¡Hola Rusito!
ResponderEliminarNo sé si me atrevería a leerlo porque todavía sigo chocando con el asunto romance. Igual me lo llevo apuntado para tenerlo en cuenta cuando ande con ganas de darle una chance.
Me gustó mucho la reseña, gracias por compartirla.
Tenes una nueva seguidora por acá.
¡Un abrazo y un beso!
Hola Giorgina. Muchas gracias por pasarte, comentar y seguir el blog. Es grato saber que te gusto la reseña. Compartir mi punto de vista sobre las lecturas, es la idea detrás del blog.
EliminarSobre lo que comentas, creo que puede ser una buena opción está novela, ya que no es un romance típico y edulcorado. Cuando le des la chance, hazme saber que te pareció.
Un abrazo y beso para ti también.
Hola!! Muchas gracias por la reseña. Voy a confesar que no conocía el libro ni a la autora; aunque no es el tipo de libros que suelo leer y eso puede explicarlo :)
ResponderEliminarEn general no soy muy fan de las historias románticas puras, y menos si tienen mucho drama; pero no descarto leerlo más adelante. Tengo que dejar mi zona de confort.
Un beso grande!
Hola. Gracias a ti por leer el blog y comentar.
EliminarDe vez en cuando, es bueno salir de la zona confort y leer algo diferente ;)
Aunque como bien dices, es romance puro, con una alta dosis de drama. Así que vete con cuidado, cuando cruces la línea de la zona de confort y decidas leerla. Espero saber que tal te va, si decides darle una oportunidad.
Otro beso grande para ti.